sábado, 23 de diciembre de 2023

José María Gómez Ángel


Jorge Giraldo, "Gómez Ángel: agente y cronista de la fundación de Jardín", pp. 11-12.

Puede leerse en el vínculo: columna derecha, acápite Narrativas pueblerinas.

sábado, 16 de diciembre de 2023

Ante el 2024

Oh, mi hacedor, dueño de tanta música,

juntando siempre los cuerpos y sus voces,

lo que se ve, lo mucho que no vemos,

el tacto de cada quien en otro,

la inocencia de soñarnos más dichosos.


Eugenio Montejo

sábado, 2 de diciembre de 2023

Gaza, Ucrania... Colombia

Cruzar el río

 

Soy un soldado de la libertad en el ejército de la humanidad.

Somos los elegidos, somos los combatientes, ¿entendido?

La causa es noble, es una justa causa.

Si es necesario, estamos listos a pagar con nuestras vidas.

 

Cruzaré el río profundo y ancho.

Cruzo hacia el otro lado del río.

 

Ahora soy un soldado de fortuna, soy un perro de guerra.

Y nos importa un comino por quién estamos matando.

Es la misma vieja historia con un nombre diferente.

Muerte o gloria, es el juego de matar.

 

Cruzaré el río profundo y ancho

Cruzo hacia el otro lado del río.

Nada los detendrá mientras el día siga a la noche.

 

Lo correcto se convierte en un error, la izquierda se convierte en derecha.

Y cantan mientras marchan con sus banderas desplegadas.

Hoy en las montañas, mañana en todo el mundo.

 

Ride across the river, 1985

Mark Knopfler

Versión libre 

miércoles, 25 de octubre de 2023

lunes, 16 de octubre de 2023

Creatividad y democracia

CREATIVIDAD Y DEMOCRACIA

Jorge Giraldo, autor de “Populistas a la colombiana”, hace una crítica del ensayo sobre Gustavo Petro publicado por Carlos Granés en este medio.


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miércoles, 30 de agosto de 2023

Darío Ruiz, a propósito de Narrativas Pueblerinas

LA PRESENCIA DE LAS REGIONES

Darío Ruiz Gómez

El centralismo colombiano único y nuclear destruyó, mediante una división territorial en abstracto, las voces y experiencias socio-culturales de las distintas regiones de un país rico en diversidad cultural, en fauna y flora, en expresiones musicales, técnicas constructivas, tal como lo había constatado la Expedición Botánica con la presencia de José Celestino Mutis y su magistral trabajo de clasificación de plantas e incorporación a la cultura de Occidente de imágenes singulares donde la creatividad de los dibujantes plasmaba lo que llamaría el espíritu de cada planta, hoja, tallo o sea el trasfondo climático de llanuras y altas montañas, de la orilla de los ríos o de los barrancos. Tarea que Codazzi retomará con el mismo aliento científico que Foucault señala en la obra rigurosa de Linneo con su cuadro del conocimiento y la taxonomía de clasificaciones. 

El espíritu de la Ilustración que entendía que la construcción de una nación debía partir del previo conocimiento palmo a palmo de cada región en particular para que cada región sumara experiencias a ese concepto de Estado en que, bajo el horizonte de la libertad, se prosiguiera la tarea de reconocimiento de geografías, de habitantes y costumbres convertidos en ciudadanos(as) por encima de diferencias de razas y credos religiosos, tal como lo llegó a señalar Rousseau. ¿No fue este mismo espíritu de identificación desde una geografía y sus particularidades territoriales el que condujo a John Muir, a Thoreau, a reconocer en la vivencia de los grandes bosques y ríos norteamericanos, el origen y punto de arranque para la construcción de una nueva sociedad? ¿Existiría una noción de ser del antioqueño, como recordaba Juan Luis Mejía, si ese punto de arranque y de origen no nos lo hubieran dado una obra magna como La geografía de Antioquia de Manuel Uribe Ángel o investigaciones como La flora sonsonesa de Joaquín Antonio Uribe? Recuerdo que en una vereda de Marmato una losa recuerda el paso de Humbold, el fundador de la Universidad alemana, depósito de todas sus clasificaciones -muchas de ellas con Bonpland- de nuestra flora, de los grandes cambios climáticos, de estas orografías, todo bajo, repito, el iluminado cielo proyectado por la Ilustración.

Cuando observo en los canales regionales de T.V. a diferentes grupos de historiadores que han recuperado la importancia de la historia local y la tarea de admirables grupos de investigadores de la flora, la fauna, de especialistas ilustres en planificación regional, pienso que en el momento en que la estructura política del país se vuelva a identificar con estas realidades verificadas in situ y no continuemos bajo la visión abstracta del centralismo, no solo bogotano sino el de las capitales de los diferentes departamentos, cuando recabo en la obra de un genio científico como Víctor Manuel Patiño  y su historia de las plantas, del concepto de cultura, del paisaje como construcción, pienso entonces que los distintos puntos de arranque para la recuperación del país nacional que no es otra cosa que la certificación de este sinnúmero de historias locales, de testimonios invisibilizados por el totalitarismo  y la pereza intelectual, debe empezar ahora mismo bajo la perspectiva única del reconocimiento real de la autonomía de las regiones, la única además que puede sacarnos de las criminales polarizaciones a que estamos sometidos regresando a la más atávica de las violencias . 

P.D.: Oyendo en Jardín este fin de semana unos conciertos de los adolescentes de la Escuela de Música, con su magistral ejecución de obras de suma complejidad, volví a entender el llamado de Goethe de que la cultura moderna debe partir de la experiencia de la aldea hacia lo universal.

Nota: Darío Ruiz y Juan Luis Mejía, entre otros (ver el programa), participaron en la séptima versión de Narrativas Pueblerinas, dedicada a los 160 años de fundación de Jardín.

miércoles, 26 de julio de 2023

El niño alado

El niño alado

Viña de un dios que corre libre
Oh, semilla dorada que hiciste al niño alado
Corre, corre mi pequeño
Corre hacia el mar.

Todo el cielo no pudo contenerte
Así que corre, corre, corre hacia el mar.
Corre, corre mi pequeño.

El lienzo es alto
El proyecto de una vida
Escrito en el viento
La pluma, el cuchillo.
Corre, corre mi pequeño.

Fragmento de Seneca, canción del álbum Banga, 2012
Letra: Patti Smith
Música: Leonard J Kaye.
Versión libre.
A un mes.

jueves, 13 de julio de 2023

Carta al embajador ruso en Colombia

Bogotá, 13 julio de 2023

Carta pública de protesta

Señor Embajador de la Federación de Rusia en Colombia, Nikolai Tavdumadze: Los abajo firmantes somos académicos, politólogos, historiadores, cientistas sociales, periodistas, entre otras profesiones.

El 20 de marzo de 2003 una coalición de países encabezada por los Estados Unidos invadió a Irak con base en una falsedad -que su gobierno estaba desarrollando armas de destrucción masiva- y pasando por encima de la legalidad internacional. El entonces Secretario General de Naciones Unidas, Kofi Annan, diría sin titubeo que, “desde nuestro punto de vista y el punto de vista de la Carta de la ONU, la guerra fue ilegal”.

Ahora, nuevamente, uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Rusia, invade a una nación independiente como lo es Ucrania con base en una falsedad -un supuesto régimen neonazi que amenaza su seguridad- y pasando por encima de la normatividad internacional.

Así como ayer rechazamos la invasión a Irak, hoy rechazamos con la misma indignación la invasión rusa, una acción que está pisoteando el derecho internacional, los derechos humanos y el Derecho Internacional Humanitario: Una y otra intervención solo han servido para minar la estabilidad y las reglas del orden internacional.

El misil que cayó sobre los comensales de un restaurante en la población de Kramatorsk donde se encontraban tres destacados colombianos (Sergio Jaramillo, Héctor Abad y Catalina Gómez), en compañía de una importante escritora ucraniana, Victoria Amelina (quien tristemente falleció), pone en evidencia que la población civil está siendo considerada como un objetivo militar, en abierta contravía a las normas que rigen el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.

Por lo anterior, no solamente nos solidarizamos con los ciudadanos y ciudadanas del mundo y con la escritora ucraniana que perdió la vida, sino que llamamos al gobierno de Rusia a parar esta guerra criminal y al Gobierno de Colombia le solicitamos llevar a Naciones Unidas y otros organismos internacionales la voz de protesta de nuestro pueblo.

Lista de firmas:

Albiñana Antonio. Alcántara Manuel. Balcázar Álvaro. Bleeker Mô. Borda Sandra. Borrero Armando. Corral Hernando. De Greiff Alexis. De la Torre Cristina. Duque Javier. Forero Clemente. Gaitán Pilar. Garcés María Teresa. García Sayán Diego. Garzón Vallejo Iván. Giraldo Ramírez Jorge. Guzmán Alvaro. Koenigs Tom. Langebaek Carl Henrik. Lara Patricia. Leal Buitrago Francisco. Llorente María Victoria. Machado Absalón. Massé Frédéric. Melo Jorge Orlando. Mires Fernando. Orozco Iván. Ortiz Carlos Miguel. Pardo Rodrigo. Pécaut Daniel. Perea Carlos Mario. Pizarro Eduardo. Pombo Roberto. Ramírez Socorro. Restrepo Luis Alberto. Reyes Alejandro. Rodríguez Becerra Manuel. Sánchez Gonzalo. Santos Enrique. Schubert Klaus. Thoumi Francisco. Tirado Álvaro. Tokatlian Juan. Uprimny Rodrigo. Vásquez Juan Gabriel

lunes, 19 de junio de 2023

Expedición sentimental a mi familia jardineña

 


La bitácora de este viaje es un revoltijo de recuerdos, cuentos viejos, 
interpretaciones históricas, recreaciones literarias; 
pero no es nada de eso en sentido estricto: 
ni tradición oral, ni ciencia social, ni producto imaginativo.

Edición privada y numerada de cien ejemplares.



martes, 6 de junio de 2023

Semilla de piedra

 Semilla de Piedra

Soy hija de un hombre de piedra
venado con viento parió
nací del color de la tierra
de un baño de fuego y vapor.

Busqué por el mundo mi causa
verdades de otros creí
surgió en mi conciencia la falta
del cielo donde yo crecí.

Volví al refugio de razas de piedra y de lodo
al seno de sangre manchada por todo
al campo de infancia y de muerte
al viento que impuso mi suerte.

Volví a la tierra que mis sentimientos amaban
donde yo no hallaba lo que yo buscaba
por este momento he vivido
hoy vivo mi orgullo perdido.

Autora e intérprete: Lila Downs


viernes, 26 de mayo de 2023

Jardín conmemora a Mejía Vallejo


El 23 de mayo, con motivo de la celebración del aniversario de Jardín, se descubrió la intervención realizada por el artista Felipe Giraldo y la placa de homenaje a Manuel Mejía Vallejo, en la que fuera su casa pueblerina. 
 

jueves, 18 de mayo de 2023

Modus vivendi como alternativa

 

El idealismo de la izquierda, carente de un sentido realista de la seguridad, 

y el brutalismo de la derecha, despreocupada de las regiones conflictivas  

y de sus gentes, tienen al país en un atolladero. 

¿Podrá  Colombia encontrar un consenso en la búsqueda de la paz?


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jueves, 11 de mayo de 2023

Manifiesto por la Paz Total

Manifiesto por la Paz Total

Quienes suscribimos este documento compartimos un profundo interés por la erradicación del uso
de las armas como recurso para inducir el cambio social, así como con la superación de la violencia. Algunos de nosotros hemos participado en procesos de paz adelantados por otros gobiernos; otros, los hemos analizado como académicos, autores de libros y participantes en debates públicos. Nos acercamos al proyecto de la “Paz Total” que adelanta el actual gobierno con el anhelo de que tenga éxito, pero tambien con el temor de que no logre sus objetivos. Este manifiesto contiene nuestras propuestas para mejorarlo. Al formularlas tenemos en cuenta las experiencias acumuladas por distintos gobiernos, tanto sus éxitos como sus fracasos.

1. Orden público, treguas y despejes. En cualquier tiempo, pero en especial cuando se adelantan negociaciones con grupos armados ilegales, es menester que el Estado ejerza de manera permanente su obligación de garantizar el orden público. Fragilidades o vacilaciones en este campo pueden estimular e, incluso, fortalecer actividades delictivas. Dado que la búsqueda de la paz es un mandato ineludible, es posible y conveniente pactar el cese al fuego con grupos armados irregulares previa su concentración, al final de un proceso de negociación, en zonas delimitadas. Solo así es posible que organismos imparciales verifiquen el cumplimiento de los compromisos asumidos. Nada más contraproducente que despejes prematuros o sin condiciones.

2. Cese de hostilidades. Nada impide que se pueda y se deba acordar desde ahora un cese de hostilidades, es decir, un claro compromiso de los grupos armados al margen de la ley de la no
afectación de la población civil como señal de un claro compromiso con la paz soñada.

3. Cancelación de los riesgos de neoparamilitarismo. La utilización de grupos de autodefensa para proteger los derechos de ciertos sectores sociales fue uno de los factores que en mayor medida contribuyeron en el pasado a exacerbar la violencia rural. Por esa razón preocupa que se promueva la utilización de un mecanismo parecido, así se conciba inerme, para salvaguardar los intereses de ciertas etnias (guardias indígenas y cimarronas) o comunidades rurales (guardias campesinas). Conviene, por el contrario, reiterar que la protección de los derechos de todos es tarea exclusiva de la Fuerza pública y el poder judicial.

4. Negociaciones de paz y fortalecimiento del Estado. La preservación de la legitimidad institucional implica que los procesos de paz y desmovilización deben ser vistos como una concesión del Estado a quienes se encuentran por fuera de la ley. Se justifican para buscar una mayor solidez institucional, una mayor presencia estatal en el territorio, así como un fortalecimiento de la democracia. El Estado no abdica, se fortalece en beneficio de todos.

5. Objetivos políticos de los acuerdos de paz. El objetivo central de los acuerdos de paz es la desmovilización de los combatientes, la dejación de las armas y su participación en la vida
democrática para la promoción de sus idearios de cambio social. Esta afirmación tiene especial relevancia luego de que se acordaran en 2016 amplios compromisos de reforma institucional y
ambiciosas políticas que deben ser cumplidas. Y teniendo en cuenta, además, que el gobierno actual, dado su perfil ideológico, está especialmente llamado a liderar el cambio social en aras de lograr mayor equidad.

6. Validación política de eventuales acuerdos. Si esos eventuales acuerdos incluyeren ajustes normativos, su factibilidad depende de que se materialicen en una sola iniciativa. Esto excluye la posibilidad de implementaciones parciales de acuerdos con una sola contraparte, o sucesivas en la medida en que se culminan las negociaciones con diferentes actores violentos. La lógica de la Paz Total conduce a una paz unitaria, en especial si se pretende, como debe ser, alcanzarla por un solo gobierno.

7. Estructura de los procesos de negociación. En cuanto a las negociaciones mismas, la experiencia indica que es necesario la adopción de agendas acotadas y una cierta secuencia que permita abordar primero los asuntos sustantivos, y luego, en función suya, las reglas de implementación. Es tambien deseable establecer cronogramas de negociación en función del ciclo electoral.

8. La paz como política de Estado. El gobierno, como elemento integrante de un Estado de Derecho, tiene competencias restringidas; de ordinario asume frente a actores armados compromisos que deben ser confirmados por otros órganos del poder público. Con relación al Congreso, eje de la representación popular, sus decisiones dependen del respaldo de las fuerzas políticas que lo constituyen. Los acuerdos de paz tienen que servir para aglutinar a la Nación, no para fracturarla. Para que la Paz Total sea una política de Estado no basta afirmarlo; se requiere el respaldo de una amplia alianza de los partidos y de la sociedad civil, tanto a los procesos como a sus resultados. De ahí, la significación de un “acuerdo nacional”, tal como está previsto en el documento firmado en México.

9. Objetivos de la Ley de Sometimiento. Respecto de la Ley de Sometimiento que el Congreso discute será menester estar seguros de que servirá para combatir con éxito empresas criminales generaradoras de inmensos réditos económicos. No podemos resignarnos a patrocinar una mera renovación de élites delincuenciales.

10. Negociaciones con disidentes y reincidentes. Respecto de grupos armados que ya tuvieron la posibilidad de negociar con el Estado, o que traicionaron los compromisos asumidos, es preciso proceder con especial cautela para evitar un círculo vicioso de negociaciones, fracturas, incumplimientos y nuevos acuerdos. El ideal sería, incluso, que estos grupos se acogieran a lo ya pactado en La Habana con las FARC EP, dado que la casi totalidad de sus actuales dirigentes de
ambos grupos refrendaron esos acuerdos en la X Conferencia celebrada los Llanos del Yarí (Caquetá) en el 2016.

11. Consultas con la sociedad civil. La realización de consultas con algunos segmentos de la sociedad civil, que por supuesto son valiosas, no sustituyen ni acotan las competencias de las instituciones. De ellas pueden surgir compromisos políticos para el gobierno actual y para nadie más. De allí la importancia de un respaldo social generalizado a lo largo de las negociaciones y luego de celebrados los eventuales acuerdos.

12. El papel de la comunidad internacional. Es valiosa la participación de la comunidad internacional para facilitar eventuales compromisos. En la coyuntura actual ellos son de singular importancia para Venezuela cuyo territorio ha sido invadido por grupos armados de origen colombiano. Cuba, que abandonó hace muchos años la promoción de cambios sociales violentos en la región e intenta ser un actor constructivo en la política hemisférica, puede realizar aportes valiosos a la solución de negociaciones en curso.

Suscriben este documento,
Eduardo Pizarro León-Gómez, sociólogo, profesor emérito de la Universidad Nacional y de varias universidades extranjeras, embajador de Colombia en los Países Bajos; Moisés Wasserman, doctor en bioquímica, exrector de la Universidad Nacional, columnista; Francisco Thoumi, PHD en economía, profesor universitario en Estados Unidos y en Colombia, consultor internacional; Rafael Pardo Rueda, exministro de Defensa, es-ministro del Trabajo, exsenador, ex-Alto Consejero de Paz para el postconflicto; Jorge Giraldo, profesor emérito de la Universidad Eafit; Juan Camilo Restrepo, exministro de Hacienda, Minas y Energía, jefe negociador en las negociaciones con el ELN; Alvaro Guzmán Barney, Ph.D en sociología, exprofesor de la Universidad del Valle; Enrique Santos Calderón, periodista, negociador de paz con las FARC; Armando Borrero, Ex-consejero Presidencial para la Defensa y la Seguridad Nacional; Andrés Caro, abogado, profesor de la Universidad de los Andes; Luz Helena Sarmiento, ingeniera, exministra de Ambiente, negociadora de paz con el ELN; Gloria María Borrero, exministra de Justicia, ex directora de la Corporación Excelencia en la Justicia Excelencia, investigadora; Jorge H. Botero, exministro de comercio, columnista; Jorge Orlando Melo, historiador; Alejandro Reyes Posada, sociólogo, experto en asuntos agrarios, asesor en procesos de paz; Freddy Padilla de León, general en uso de buen retiro del Ejército Nacional; Francisco Leal Buitrago, profesor emérito, Universidad Nacional de Colombia; Gustavo Duncan, profesor de EAFIT; Rafael Aubad, ex rector de la Universidad de Antioquia, ex director de Proantioquia; Camilo Reyes, exministro de Relaciones Exteriores, exembajador en los Estados Unidos; Luz Helena Sarmiento, exministra de Ambiente, ex negociadora de paz con el ELN.

Bogotá, mayo de 2023

sábado, 29 de abril de 2023

Agudelo y su mural


Mural conmemorativo del centenario de Mejía Vallejo en la escuela Jahel Peláez, Jardín. Artista: José Fernando Agudelo. Foto: Aurelio Restrepo.

lunes, 3 de abril de 2023

Florecer en el país del Suroeste

Manuel Mejía Vallejo nació por casualidad en Jericó, pero creció en Jardín. Esta región antioqueña donde pasó varios años fue inspiración para sus obras. Un recorrido literario, casi a pie.

Publicado en Generación, 2 de abril de 2023.

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(Si no es posible leerlo, por cualquier restricción, aparecerá en este blog en la sección "Narrativas pueblerinas" el 23 de abril.)

miércoles, 22 de marzo de 2023

Lecciones de Pécaut

Mi primer encuentro con la obra de Daniel Pécaut fue hace 45 años. Yo era un joven sindicalista de 20 años que acababa de abandonar sus estudios de historia para dedicarse a la militancia social. Los inconformes de Ignacio Torres Giraldo y Política y sindicalismo en Colombia, de Pécaut, fueron los libros más atractivos de mi nuevo curso vital aunque este último fue un desafío que me sobrepasó en aquel momento. Mi primer encuentro físico con Daniel ocurrió a principios de los años noventa cuando me visitó en la Escuela Nacional Sindical en busca de los viejos dirigentes sindicales antioqueños, y ansioso por actualizarse sobre el estado del movimiento. Ambos contactos fueron la apertura de una amistad académica marcada por su tranquila agudeza, y de ellos derivo sus lecciones.

La lección intelectual tiene que ver con nuestra común formación básica en filosofía, campo en el cual Pécaut desarrolló una maestría para articular tareas conceptuales, teóricas y valorativas con su práctica de la sociología, la historia del presente y el análisis político. Daniel desarrolló sus investigaciones a partir de un repertorio conceptual sólido que se mantiene desde 1973, sorprendentemente, y que afinó desde entonces. Viejas nociones clásicas, transformadas en sus manos, como orden o lo político enriquecieron los estudios histórico-políticos colombianos, y otras más nuevas, como lo simbólico, constituyeron una novedad que estableció lazos con la antropología y la semiología. La obra de Pécaut despliega y sustenta un conjunto de tesis fuertes que ya conforman una teoría criolla sobre el devenir colombiano: la complementariedad del orden y la violencia, la debilidad de una simbólica nacional, el prosaísmo de la violencia, la negación del populismo, la pobreza de las ideas políticas en el país, entre otras. En cuanto al aspecto valorativo, no se queda en las teorías meso ni en el plano interpretativo sino que ofrece una evaluación, unos juicios de valor, que iluminan su análisis y que se presentan con elegancia y sobriedad, ejercicio complejo y constructivo en un ambiente intelectual poco diestro en el debate abierto y constructivo.

Más allá de su compromiso con los problemas del país y con sus ámbitos académico e intelectual, destaco sus lecciones personales más afectivas: la generosidad en la enseñanza y la socialización del conocimiento (en las ONG o en la Universidad Eafit), la apertura para realizar nuevas preguntas e integrar a su bagaje nuevos problemas (narcotráfico, violencia urbana, mafias, memoria), y la delicadeza y amabilidad en la expresión de las contradicciones (sobre guerra civil o populismo, en mi caso).

Mi gratitud hacia un maestro que siempre se presentó como un colega cordial y modesto.

Publicado en Análisis Político 105, julio-diciembre de 2022, pp. 165-166.
Incluye dos correcciones al texto publicado.

lunes, 13 de marzo de 2023

La perspectiva de Pécaut sobre el populismo

 


"El populismo como clave interpretativa para la política contemporánea colombiana"

RESUMEN

Este artículo rastrea el concepto de populismo en la obra de Daniel Pécaut y ofrece una explicación de la manera en la que el sociólogo colombo-francés argumenta la tesis de que el rechazo al populismo incidió de manera fundamental en la configuración de la trayectoria política colombiana en el siglo XX.

Palabras clave: 

Daniel Pécaut, Colombia, siglo XX, populismo, liberalismo, antipopulismo, orden político, Marco Palacios.

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jueves, 9 de marzo de 2023

Video de la conferencia de Jursich sobre Belisario Betancur


Para acceder al video de la Cátedra Luis Ospina Vásquez 2023, a cargo de Mario Jursich, cuyo título es "Belisario Betancur: ¿un excéntrico del conservadurismo?", pulse aquí

sábado, 4 de febrero de 2023

Jardín sin Belisario

¿Qué habría sido de Jardín sin Belisario? Esta es una de esas preguntas que llamamos, en lógica, contrafáctica.

El hecho, lo fáctico, es que el presidente de la república Belisario Betancur declaró monumento nacional al templo y al parque de Jardín, por medio del decreto 1132 de 1985. En virtud de ese acto pasaron a ser bienes representativos de la cultura y de la historia nacionales y, por tanto, a estar protegidos por normas y ser objeto de atención del gobierno central para su recuperación y sostenibilidad.

Cuando un gobernador, alcalde o cualquier funcionario se abroga méritos por la intervención en el parque, donde ya tenemos una horrenda placa, le está mintiendo a la ciudadanía. Está tratando de ganar indulgencias con padrenuestros ajenos.

Dejemos el vainazo y volvamos al contrafáctico. ¿Qué habría sido del templo y del parque sin la legislación nacional sobre patrimonio y la supervisión del Ministerio de Cultura? ¿Qué sería Jardín sin su parque y sin su templo?

Y pasemos a las aspiraciones: ¿Qué más es posible hacer para conservar y enriquecer el patrimonio arquitectónico del pueblo? Porque la voracidad privada y pública amenazan.

Entonces hoy, que se cumplen cien años del nacimiento de Belisario Betancur, vale la pena un acto de gratitud de los jardineños.